Sabemos que el agua es fundamental para la existencia de la vida en la Tierra, que de ella depende nuestra salud y que, tratada puede curarnos de múltiples dolencias. También sabemos que las cosas que nos rodean tienen una especie de “memoria”. Pues bien, gracias al doctor Masaru Emoto hemos dado ahora un paso más en el conocimiento del elemento que compone el 70% de nuestro cuerpo y de nuestro planeta. Y es que este investigador japonés afirma que ¡la voz, los pensamientos y las emociones humanas pueden alterar su estructura molecular! Y para demostrarlo aporta más de 10.000 microfotografías efectuadas a lo largo de numerosos años mediante la utilización de resonancia magnética.
En el mundo científico, a menos que un experimento sea repetible por un observador independiente, sus hallazgos son considerados inválidos. Esto es exactamente lo que hizo el Dr. Emoto, a través de experimentos repetibles demostró, que los pensamientos humanos y las emociones pueden alterar la estructura molecular del agua. Ahora, por primera vez,hay evidencia física de que el poder de nuestros pensamientos pueden cambiar el mundo dentro y alrededor nuestro.
Un punto importante a tratar... cuando el agua fue tratada con aceites florales aromáticos los cristales tendieron a imitar la forma de la flor original. Lo que parecería demostrar que el agua ha captado la información de la flor. Y otro tanto ocurre con las plantas medicinales. Un hecho que fundamenta la forma tan íntima en que están conectadas todas las cosas en el Universo. Por ejemplo, si nos fijamos en la fotografía mostrada antes, producida con una muestra de agua estancada después del tratamiento con meditación/oración, revela una forma que nunca antes había sido observada por el Dr. Emoto en ninguno de sus 10.000 experimentos con muestras de agua. Como podemos ver, la forma es heptagonal, un cristal de 7 lados. Ésta fue la única imagen con “siete” puntas obtenida en los estudios, pues por lo general el agua cristaliza en estructuras hexagonales de 6 puntas. El reverendo Kato explicó que durante su meditación el invocó a las Sietes diosas de la Fortuna... También fijémonos en la estructura cristalina formada por la palabra “Alma” no es curioso que en el centro de la estructura cristalina se puede observar una imagen en forma de corazón.
El Dr. Emoto se dio cuenta que todo lo existente está vivo y tiene frecuencia de vibración, un campo magnético de resonancia. Midió este campo usando un Analizador de Resonancia Magnética. Esta investigación explica que importante es el sonido en la vida.
Finalmente las conclusiones que ésta investigación ofrece, fundamentalmente con respecto a lo que los Guías nos han enseñado son realmente para meditar. Recordemos... nuestro propio cuerpo está compuesto en un 70% de agua, al igual que la superficie de la Tierra. Hemos visto anteriormente la prueba de que el agua, lejos de estar inanimada, está realmente viva y responde a nuestros pensamientos y emociones. Quizá, habiendo visto esto, podamos comenzar a entender realmente el imponente poder que poseemos al elegir nuestros pensamientos e intenciones, para sanarnos a nosotros mismos, así como a nuestro medio ambiente. Pero esto solo será posible si creemos. Todo comienza a partir de nosotros...
Libro de consulta: “Mensajes del Agua” de Masaru Emoto.
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