Editorial: Marzo 2005

Una de las principales enseñanzas que nos dejo el Maestro Jesús fue “Amaos los unos a los otros”. El amor es según las enseñanzas de los Guías la 1° Ley del Universo.
Cuando nacimos en este planeta, teníamos una tendencia natural a concentrarnos en el amor. Nuestra imaginación era creativa y floreciente, y sabíamos usarla; estábamos conectados con un mundo lleno de magia.
Luego nos enseñaron a concentrarnos en otras cosas, a pensar en forma antinatural. Nos enseñaron una forma de vida negativa y una manera de mirar al mundo y a los seres humanos en contradicción con lo que somos.
Nos enseñaron a pensar en la competición, en la lucha, la enfermedad, la maldad y la culpa. Nos enseñaron que sacar buenas notas, tener dinero y hacerlo todo como es debido son cosas más importantes que el amor.
Debemos recuperar el amor, hemos venido aquí para crear, junto con el universo, extendiendo el amor; esto no significa cambiar nuestra forma de ser, sino nuestra forma de percibir el mundo, solo es necesario ver un poco más allá y volver a conectarnos desde el amor, dejando de lado la materialidad.
El mundo del amor es el mundo que conocíamos cuando todavía estábamos conectados con nuestra ternura, nuestra inocencia, nuestro espíritu y con el Universo.
¡Que la Fe, el Amor y la Paz nos acompañen!