Un inversor acusado de utilizar información privilegiada para lucrarse asegura ser un viajero del año 2256.
Ésta es la explicación que ha dado Andrew Carlssin para explicar su increíble cadena de inversiones extraordinariamente afortunadas, que apenas en dos semanas, le llevaron de tener un capital de 800 dólares a una cartera de 350 millones de dólares.
Según ciertas informaciones, agentes de la comisión de seguridad y cambio de EEUU detuvieron a Carlssin luego de comprobar que en un breve período de tiempo había realizado 126 operaciones de bolsa de alto riesgo con un éxito extraordinario. El detenido acabó confesando que no había podido resistirse a la tentación de enriquecerse con la información sobre la evolución de la bolsa que tenía de su época. Curiosamente no figura ningún registro a su nombre antes de Diciembre del 2002.
El pretendido crononauta ofreció revelar sucesos históricos como el paradero de Bin Laden, o la cura del Sida, si es puesto en libertad y se le permite volver a su época.
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