EDITORIAL Setiembre 2013

El mensaje del Cristo, ese mensaje por los que muchos dariamos la vida (y seguramente ya la hemos dado), es la Misión; hacerlo vivir en nosotros y transformarnos en ejemplos de vida para que otros lo sigan. Que maravillosa Misión de vida, que llevamos adelante con gusto y satisfacciones y además no la llevamos adelante sólos, nos acompañan nuestros hermanos de “las vidas”, nos acompañan los “Hermanos Mayores” y fundamentalmente nos acompaña el Maestro Jesús.
Es el tiempo de “tirar las redes”, ya que mucha gente está buscando respuestas, y gracias al contacto y a la labor de muchos hermanos del camino, tenemos esas respuestas. La doctrina y las enseñanzas de Jesús no estaban destinadas a fundar una religión, sino a crear misiones que condujeran a la iluminación espiritual. Jesús quizo acercarnos al Reino del Padre, un Dios protector y bondadoso y nos mostró el camino y nos dijo que “el reino de los cielos está dentro de nosotros”.
Es el momento de mostrarles el camino a todo el que lo quiera ver y transitar y que el Padre nos de la fuerza y la sabiduría para lograrlo. ¿Qué así sea! Hnos. Del Boletín